Aunque muchas personas no le dan el cuidado correcto, los pies son una de las zonas más importante del cuerpo, además de formar una parte vital de nuestra apariencia, sobre todo para las mujeres, estos están propensos a sufrir de callos y hongos.
La incidencia en el padecimiento de callos y hongos en los pies se debe principalmente por el uso de zapatos y medias sintéticas en donde se mantienen con mucha humedad y también por la exposición a sitios públicos, como baños y piscinas.
CALLOS Y HONGOS ELIMÍNALOS CON UN REMEDIO CASERO INCREÍBLE
Te sorprenderá cómo puedes eliminar los callos y hongos de los pies con un remedio súper sencillo y rápido que puedes preparar en tu hogar.
Este remedio que te enseñaremos es muy sencillo sólo necesitarás dos ingredientes y lo mejor de todo, obtendrás excelentes resultados a un muy bajo costo, así que presta atención y no dudes en utilizarlo, te garantizamos que eliminarás los callos y hongos rápidamente.
Tratamiento con remedio casero
Para llevar a cabo este tratamiento necesitarás los siguientes ingredientes:
Cinco aspirinas.
El zumo de un limón.
Y necesitarás una piedra pómez.
Preparación:
Preparar este remedio es muy sencillo, sólo deberás seguir los siguientes pasos:
En primer lugar utiliza un mortero para triturar las aspirinas hasta conseguir que estén en polvo.
Luego de trituradas colócalas en un envase preferiblemente de vidrio e incorpórale el zumo de un limón, mezcla bien hasta que consigas una especie de pasta y listo ya tendrás preparado tu remedio, la textura debe ser homogénea, compacta y pastosa.
Modo de empleo:
Para utilizar este tratamiento y eliminar callos y hongos deberás seguir los siguientes pasos:
Primero que nada es importante que tengas los pies bien limpios, así que lávalos adecuadamente para remover cualquier suciedad que puedan tener.
Luego aplica un poco de la pasta que preparaste en los callos y hongos y deja que actúe sobre el área afectada por 30 minutos, transcurrido este tiempo retíralo con abundante agua, preferiblemente templada.
Luego debes frotarlos con movimientos circulares y con la ayuda de la piedra pómez, esto te ayudará a eliminar la piel que se encuentre muerta y suavizará la zona dura.
Enjuaga nuevamente con agua templada y seca muy bien tus pies.
Luego de realizado el tratamiento te recomendamos hidratar tus pies con una crema hidratante, recuerda que los pies tienden a padecer de resequedad así que acostúmbrate a colocarle crema diariamente.
Este tratamiento debes repetirlo unas dos o tres veces a la semana para que obtengas mejores resultados y más rápido, esto te permitirá evitar la proliferación de las bacterias y hongos que además de afectar estéticamente tus pies pueden causar molestias como comezón y mal olor, además de ayudarte a mantener el equilibrio del pH de tu piel.